Lograr una atmósfera agradable en casa durante los meses de más calor es el objetivo de muchos usuarios de viviendas familiares y otro tipo de residencias y edificaciones. Los recuperadores de calor entálpicos ofrecen una solución idónea para reducir los niveles de humedad habituales en regiones de clima mediterráneo, con veranos muy calurosos y ‘pegajosos’, como son Cataluña, Comunidad Valenciana, Murcia, Islas Baleares y Canarias.
Pasamos mucho tiempo dentro de casa. En el menor de los casos, el 50% de nuestras vidas, si tenemos en cuenta las horas de descanso y comidas. Por eso, es importante sentirnos cómodos en todo momento en el interior de nuestras viviendas y son muchos los factores que nos ayudan a conquistar ese bienestar.
Por un lado, la temperatura, lo más fresquita posible durante los meses en que aprieta el calor. Pero también es importante reducir la humedad para evitar sentirnos pesados y reducir a cero el sudor. Además, el confort se logra con un aire renovado, libre de gases contaminantes, compuestos orgánicos volátiles y demás elementos que vician el ambiente.
El compromiso de TECNA con el aire limpio se demuestra, una vez más, en la gama de recuperadores de calor entálpicos, en concreto los recuperadores de calor RCH, la solución de ventilación con recuperación entálpica elegida por los instaladores más exigentes.
El mejor intercambio de aire
La recuperación entálpica se centra, en la entalpía, una medida de energía propia de sistemas termodinámicos. Así, los intercambiadores de calor entálpicos trabajan mediante transferencia de calor y humedad entre el aire de entrada y el aire de salida. En ese proceso, recuperan la energía del aire saliente y refrescan el aire que entra, creando una atmósfera libre de humedad y con una temperatura confortable. Se llaman recuperadores porque recuperan tanto el calor sensible (relacionado con la temperatura) como el calor latente (relacionado con la humedad).
Esto es posible gracias a que las unidades de ventilación RCH incluyen un intercambiador de calor y dos ventiladores. El primer ventilador permite expulsar el aire viciado de dentro de la vivienda, mientras que el segundo ventilador suministra aire renovado, fresco y limpio, desde el interior. Es decir, el mejor intercambio de aire posible gracias a una tecnología de ventilación mecánica controlada que ahorra energía al reducir la carga latente de refrigeración en verano y mejorando el ambiente térmico en invierno.
Esto se traduce en una recuperación sensible de hasta el 82% y una recuperación latente de hasta el 74%.
Los más demandados en vivienda sostenible
Las características técnicas de los recuperadores de calor entálpicos los convierten en los equipos más indicados para aquellas viviendas herméticas que apuestan por la mayor eficiencia energética.
Chalés y viviendas unifamiliares se encuentran entre los clientes más asiduos de la gama entálpica de TECNA. Entre las razones, el ahorro energético y económico que implica la instalación de un recuperador de este tipo, ya que gracias a ello no se necesita abrir puertas ni ventanas, ya que llevan a cabo una ventilación integral del hogar.
Así, se mejora la atmósfera del interior de la vivienda con una pérdida mínima de energía, ya que el ambiente no se reseca ni se ‘carga’, puesto que los recuperadores de calor entálpicos están constantemente aportando aire limpio y fresco a la vivienda y al tiempo que se extrae el aire viciado y se recupera el calor.
¿Y en cuánto a la temperatura?
Porque a la hora de instalar un equipo de esta envergadura, el usuario quiere las máximas prestaciones. Eficiencia energética y reducción de la huella de carbono, ahorro en la factura de luz y un aire renovado y limpio, pero también equipos que generen una temperatura óptima, tanto en los meses de calor como en los de frío.
Si bien la ventilación natural provoca un desperdicio de energía, con los intercambiadores de calor de alta eficiencia de TECNA se recupera la energía al tiempo que se produce una renovación constante del aire que entra y sale.
Durante la noche, gracias a la opción Freecooling, suministra aire más frío del exterior para reducir la carga de refrigeración de otros sistemas de climatización complementarios. Es decir, se logra un aire más fresco que convierte las noches de verano en una experiencia mucho más placentera y agradable, al evitar la sensación ‘pegajosa’ que provoca el calor de las regiones costeras.
En invierno, el proceso se invierte para mejorar el bienestar térmico con un calentamiento gratuito conocido como Freeheating: esto es posible gracias a una compuerta motorizada que realiza un By-pass al intercambiador de calor, generando la climatización que corresponde según la temporada.
Así, se mejora el confort térmico durante el invierno y se mantiene a raya la humedad, con una temperatura fresca durante el verano, todo ello con un aire saneado que da gusto respirar, sin necesidad de abrir las ventanas.
Además, el usuario no tiene que preocuparse por la configuración de los distintos modos de operación, ya que estos se ajustan de manera automática según las condiciones deseadas y las condiciones climáticas de cada estación.
Todo esto hace que se adaptan perfectamente a las necesidades de las viviendas de tipo unifamiliar y, sobre todo, en aquellas que aspiran a un alto nivel de sostenibilidad, como el que acreditan las distintas certificaciones energéticas (Passive House, BREEM, LEED o WELL).
Tanto en su aplicación residencial como para espacios comerciales, las unidades de ventilación RCH están diseñadas para extraer el aire viciado del interior para introducir aire renovado, fresco y limpio, del exterior.
Para ello, dentro de cada recuperador de calor, se encuentra la pieza clave, la piedra angular de este sistema de ventilación: el intercambiador de calor entálpico de flujos cruzados. Este elemento permite que tanto el flujo del aire de extracción como el flujo del aire de impulsión fluyan adecuadamente, eso sí, sin mezclarse. Así, transfieren calor y humedad de la corriente de aire más caliente y húmeda a la corriente más fría y seca.
Entre sus características técnicas, hay que resaltar los siguientes puntos:
- Diseño compacto y ligero.
- Compuerta By-pass.
- Motores EC.
- ERP Ready.
- Control de caudal constante independiente de la presión mediante ModBus.
- Sondas de temperatura en admisión impulsión, retorno y extracción.
- Señalización de filtros sucios mediante presostato diferencial.
- Filtración G4+F9 en impulsión.
- Clasificación energética A.
Además, cuenta con un sistema de control que ofrece amplias posibilidades, como un modo WiFi opcional para control móvil a través de app, y pantalla LCD incluida de serie para control inteligente.
Se trata de modelos de instalación horizontal que van de los 25 a los 33 kg de peso en la gama residencial y de 38 a 81 para la instalación comercial.
Las ventajas del control inteligente
La gama de entálpicos residenciales está pensada para un uso más cómodo si cabe de los recuperadores de calor entálpico, con un control WiFi, es decir, vía app, que permite un uso más eficaz de los equipos. Como una programación por horarios, pero también por consignas de funcionamiento, es decir, permitiendo la activación si se atraviesan ciertos umbrales de temperatura o de humedad.
También facilita un control remoto a través de la app, para que puedas activar o desactivar el equipo a tu gusto cuando no estés en casa. Esto es especialmente cómodo cuando el usuario regresa de un viaje y quiere acondicionar las condiciones de climatización de su vivienda para que, a tu llegada, encuentre el mejor ambiente posible en su casa, con un aire renovado y sensación de frescor.
Los recuperadores de calor de TECNA surgen para cubrir el hueco que faltaba en el sector de la climatización. La pieza fundamental para lograr el bienestar integral, tanto en hogar como en superficies comerciales y de ocio.
No dudes en contactar con los asesores de TECNA para ampliar esta información.
